Taller Seduce con tu elevator pitch ganador por Silvia Bueso

Descubre las claves para $educir y convencer con tu discurso con gancho

Destinatarios:

El taller de 2 horas de duración va dirigido tanto a los Mobers como a sus colegas y amigos más cercanos. Si tienes un proyecto o empresa con la que quieres seducir a clientes, empleados, socios e inversores, este es tu taller. En dos horas sabrás $educir para convencer con gancho.

Objetivo:

Prepara y practica el discurso de tu empresa o proyecto para seducir a tus públicos
Suéltate la melena y atrévete con tu estilo de comunicación más auténtico
Relaciónate con los demás, co-creando soluciones conjunta y beneficiosas para todos
Conviértete en el mejor preguntólogo para detectar puntos en común con tus públicos
Diviértete y dale alas a tu creatividad

Cuándo y dónde:

Dos horas de tu tiempo para brillar en tus discursos. El taller tendrá lugar el 2 de febrero de 17h a 19h en la sede de la calle Bailén de Mob Barcelona.

Metodología:

Tú serás el protagonista
Tú practicarás en vivo y en directo
Tú conocerás un método sencillo para tus discursos con gancho y salero
Tú saldrás de la zona de confort
Tú te dejarás llevar y descubrirás la magia de tus compañeros y compañeras

Precio:

¡Apúntate ya! Las plazas son limitadas. Los primeros o primeras 25 inscripciones disfrutarán de este taller. Los Mobers tenéis condiciones especiales, con un precio de 20€. Dad voces entre colegas y compañeros que también pueden apuntarse, por 30€ el taller.

Sobre Silvia Bueso:

Soy Captadora de Fondos, Comunicadora y Coach y he consolidado mi pasión por saber pedir actuando como captadora de fondos en escuelas de negocios como ESADE y EADA. A raíz de esta experiencia, tomé conciencia de que es una pasión antigua que ejerzo por pura convicción, ya que a los 16 años recaudé fondos vendiendo chocolatinas para reformar el instituto en el que estudiaba en Estados Unidos.

El secreto para pedir con gancho pasa por dar, dar y dar a los demás. Son las dos caras de una misma moneda: en el pedir está el dar, y el que da, siempre recibe. Pedir es muy digno, incluso saludable, siempre que pongamos el foco en primero servir a los demás.